Völuspa, Ragnarök y oscuridad.

Erlezombie_Zombified · 8 de Junio del 2020

¿Alguna vez te has preguntado como comenzó todo? Hablo de, literalmente, toda la existencia... ¿No? Pues permite que comparta contigo un relato interesante. Aprende de él. Si es que te lo permite aquella miserable capacidad humana llamada razonamiento, claro...

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Oscuridad. Profundidad. En un inicio no había nada… Todo estaba sumido dentro de los abismos de Ginnungagap. La nada lo era todo y todo era nada. No hay verdad más absoluta… ¿O si? La nada gobernaba en la antigüedad. Reina perfecta y absoluta… Pero siempre debe haber un conflicto. La realidad misma es siempre una lucha de fuerzas.

Hace ningún momento, pues aún no existía el tiempo, la existencia se impuso ante la inexistencia, y las cosas se crearon a partir de esa victoria. Esa fue la primera guerra. "¿Por qué tenemos átomos?" Porque la materia atómica es más estable que el caldo primigenio. Los átomos derrotaron al caldo. Esta fue entonces la segunda guerra. Había dos formas de existir y una de ellas ganó. Y todo lo que vino después estaba hecho de átomos. Los atomos formaron las estrellas, y con ellas se formó el fuego. Pero también se formó la oscuridad, que apartada del calor de todo, se convirtió en hielo.

Así comenzó todo, originado de Fuego y Hielo. De la violenta lucha entre estas dos fuerzas, una caliente y la otra fría, nacieron el mar y la tierra. Un acuerdo mutuo, casi podría decirse, pero el agua siempre intentaba devorar a la tierra, y la tierra crecía cada vez más, apoyada por el fuego, consiguiendo así que la lucha permaneciera por siempre. Dentro del agua se liberó entonces otro conflicto. El universo está siempre en constante lucha. Y nuevamente hubo una guerra. La tercera gran guerra. Pelearon la vida y la muerte y se impuso la voluntad de vivir. Nació de entre las aguas el gran gigante de hielo Ymir, y tras él, todas las formas de existir tenían vida. Ymir el primigenio, el eterno, el gran nacido de las tinieblas... La vida surgió del frio y la noche, y a la oscuridad regresamos al momento de morir. Pero en estos sitios ignoran una gran regla en la existencia de las cosas…

~~Me presiono a mí mismo hasta el filo de la locura, buscando una forma sencilla de expresarme, intentando explicar la verdad.~~

Es tan fácil. Todo se resume a una verdad elegante y afilada como la punta de un cuchillo. Y esto no es una hipérbole ni podría estar más lejos de la exageración: Esta verdad lo es TODO.

Pero lo expones y la gente te mira como si estuvieras exhalando polvo. Demente talvez. Perdido en los límites de la inconciencia... Quizá a los que leen esto les falte una estructura subyacente de la verdad. Quizá estén todos descansando sobre un lecho de mentiras al que hay que prender fuego...

¿Por qué existen las cosas?

~~No, no, no uses esa palabra. No hay ningún "motivo". No hay razón en la existencia de las cosas… Eso es teología y lo teológico te ciega la vista.~~

En el comienzo de todo, tras las primeras dos guerras, los átomos formaron las estrellas. Las estrellas formaron el firmamento. Los nueve mundos dejaron de bullir, llenos de roca, hielo, fuego y ácido, y en los humeantes mares primitivos la primera molécula aprendió a copiarse a sí misma, dando origen a la vida. Todo esto sucedió gracias a una ley, la ley ciega, que existe sin conciencia o significado. Es la ley más sencilla pero no tiene adoradores aquí…

~~Es complicado explicar algo tan profundo… Pero lo explicaré con un ejemplo de tu propio mundo, para que puedas entenderlo.~~

Imagina un mundo dividido en tres grandes naciones, que sean gobernadas por tres grandes reinas. ~~Midgard~~, ~~Schwartzvald~~ y ~~Arunafeltz.~~ La primera reina escribe un libro de leyes enorme, impone la paz y su reinado es justo. La segunda reina se construye una torre alta donde su gente sube para mirar las estrellas y adquirir conocimientos, la nación entonces prospera. La tercera reina levanta un ejército imponente y lo conquista todo, con mano de hierro.

El futuro pertenece sólo a una de estas reinas. Su reinado es el más severo y su pueblo es infeliz. Pero ella gobierna. Esta reina consiguó imponerse ante sus adversidades.

Esto lo explica todo, ¿entiendes? Por eso el universo es como es, y no de otro modo. La existencia es un juego en el que participa todo, y algunas estrategias salen vencedoras, sin importat la moralidad de los actos o lo rastrero que puedan parecer a los demás: la capacidad de existir, de moldear la existencia, de reconstruir la estructura de todo para que tus descendientes florezcan, y evitar que otros tengan espacio para hacerlo. Domina el arte de la guerra, y entenderás el juego de la supervivencia...

La gente que mira a las estrellas, aprendieron sobre esta ley universal. Comprendieron que todo cambio implicaba la extinción de el resto de probabilidades... Y, quizá hayan predicho su inminente caída como civilización... De haberlo hecho, son unos imbeciles por no haberse preparado para el conflicto. De no haberlo hecho era mucho peor, pues demostraban una vez más que la forma de la guerra es la única vencedora, y la forma del conocimiento no tenía importancia en realidad... La reina tirana seguirá gobernando y conquistando, fortaleciendo a su gente a base de la sangre de sus enemigos, imponiendose ante el universo... Y conforme este universo se aproxime a su clausura, el gran inevitable Ragnarok llegará, y los grandes jugadores acabarán enfrentándose. En la siguiente gran guerra habrá tres reinas y todas ellas tendrán ejércitos imponentes, y será una batalla de espadas, hasta que una descubra el cañón, o las armas biologicas, o las palabras letales.

Todo se vuelve más despiadado y al final solo quedarán los más inflexibles, y ellos cazarán en los territorios de la noche, y extinguirán el primer destello de rivalidad antes siquiera de que sea capaz de entender a qué se enfrenta o qué ha cosa ha infringido. Esa es la forma final de la victoria: gobernar el universo de manera tan absoluta que nada exista de nuevo sin tu consentimiento. Esa es la reina de los tiempos finales, la última reina, cuya soberanía es eterna porque ningún otro soberano es capaz de surgir bajo su mandato, y nadie puede derrotarla. Y no hay motivo alguno, igual que no lo había para explicar la victoria del átomo. Es sencillamente la jugada ganadora. Los atomos seguirán existiendo, como la reina.

Por supuesto, que es muy posible que hubiera otro continente, dividido en otros tres países, con otras tres reinas distintas, y que en este país ellas se reunieran para crear una sola ley soberana, y una torre para mirar las estrellas y un ejército con que proteger sus fronteras. Este es el sueño de las mentes mezquinas: un lugar gentil rodeado de lanzas.

Pero dudo que esas lanzas aguanten contra la reina del país de los ejércitos. Y eso es todo lo que importa al final.

El mundo está condenado a su propia destrucción porque nació a partir de la guerra. La ley de la sangre la llaman algunos. Al consumir a tus enemigos te fortaleces, y eventualmente deberás buscar enemigos más fuertes. Caza o sé cazado. Participa en la guerra por la supervivencia. No hay motivo para luchar. Es sencillamente que así ocurren los grandes cambios…

Así que advertido estás sobre el cómo ocurirrán las cosas... ¿Cual de tus tres reinos alberga a la reina tirana? Espero y estés en el bando ganador...